domingo, 4 de noviembre de 2018

Arévalo y su Historia

Mapa de la ruta



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Comentario

Hoy nuestro paseo, lo realizaremos por una bonita Villa Castellana Arévalo. Este lugar cuenta con mucha historia entre sus calles. Hace muchos años la Reina Isabel la Católica en su niñez, recorría sus calles, iglesias y pequeños palacetes. Hoy en día es un lugar que bien merece la pena, perderse entre sus calles y disfrutar de sus pequeños rincones. A su vez, tiene un enclave privilegiado, al estar entre dos ríos. El Adaja y el Arevalillo, por el cual discurre una pequeña senda fluvial.


Salimos junto al Arco del Alcocer, que al finalizar nuestro paseo pasaremos bajo él. Tenemos delante de nosotros la iglesia de San Juan integrada en la muralla. 



Giramos por la Calle del Principal de la Morería, donde en la misma esquina se encuentra el Palacio del Conde de Valdeláguila. Giramos la primera calle a la derecha que nos va a conducir a la Senda Fluvial del río Arevalillo.




Bajamos junto al Puente de los Barros, pero vamos a retroceder un poco a nuestra izquierda. Nos dirigimos hacia los restos del antiguo Molino de Valencia. Se ve el muro construido, para llevar las aguas hacia él. Hoy en día todo está en ruinas y el río no lleva ni agua. 




Retrocedemos de nuevo hacia el Puente de los Barros. Según vamos avanzando por esta bonita senda, vemos a lo lejos un bonito puente llamado Puente Medina. Antes de llegar a él, nos encontramos con un pequeño manantial llamado de las Lágrimas y un poco más adelante una serie de esculturas de hierro.
 



Hemos llegado al puente, este fue construido en estilo Mudéjar, en la época en la cual se convivía con la población musulmana.


 
La verdad que es un hermoso puente. Continuamos bajo él, nuestro paseo y según caminamos vemos en la oltananza la silueta del bello castillo de Arévalo. 


Subimos un poco para acercarnos a un pequeño mirador, desde el que se puede entrever la unión de los ríos Arevalillo y el Adaja. En este punto hay una subida que te llevaría directamente al Castillo. Nosotros optamos por tomar una pequeña senda a nuestra izquierda. Hacemos esto para tener una mejor perspectiva del Castillo rodeándolo.


Estamos ante este imponente Castillo, tras sus muros ha habido muchas historias que narrar. Fue construido a mediados del siglo XV por D. Álvaro de Zúñiga. Se puede visitar por un módico precio de 4€. Paramos a hacer unas instantáneas de tan hermoso castillo y proseguimos nuestro camino.

 
Seguimos por la calle Santa María al Picote. Pasamos por delante del Palacio del General Ríos. Llegamos a la iglesia de Santa María, por la que se pasa por un bonito arco. Es de estilo Mudéjar, denominada La Mayor, por ser la iglesia principal durante siglos.


Continuamos un poco más avanzando hasta llegar al Palacio de los Sedeño y fachada del Palacio de Ballesteros.


 
Retrocedemos sobre nuestros pasos, hasta llegar de nuevo a la iglesia de Santa María. Una vez aquí entramos en la gran Plaza de la Villa. Es una plaza porticada de gran amplitud en la que se encuentra el Museo de Historia de Arévalo, Centro de actividades del Mudéjar y al fondo del todo por donde saldremos de la plaza la iglesia de San Martín.





Nos quedamos un rato en la plaza, para nuestro gusto está bien conservada, pero muy fría. No hay ningún tipo de ambiente que te invite a quedarte más que lo justo. Es una pena, que la plaza, más bien parece un museo de no tocar nada.

Salimos junto a la iglesia de San Martín, es la única iglesia románica de Arévalo, seguimos la calle de San Ignacio de Loyola.




A nuestra izquierda se encuentra la iglesia San Nicolás y Colegio de Jesuitas. Y en la calle podemos ver algunos restos de entierros. Las casas nos permiten en un pequeño mirador ver el río Adaja, los arboles de ribera comienzan a cambiar su color de hoja.


 Hacemos un pequeño rodeo a la iglesia de Santo Domingo de Silos, para acercarnos un momento a la Plaza del Arrabal. 



Salimos una vez rodeada la iglesia a la calle de los Caldereros. Llegamos a la Plaza del Salvador y nos acercamos a ver la Plaza de Ángel Muñoz.



Retrocedemos hacia la Plaza del Salvador. Ahora vamos a caminar por calles estrechas como la Las Tercias, para llegar a la calle Larga. En la que se encuentran numerosos edificios de interés cultural. Algunos como la Casa de las Milicias Concejiles o el Palacio de Altamirano.




Desde ahí subimos por la calle de los Sombreros hasta dar de nuevo a la Plaza del Arrabal. Esta plaza es una de las más concurridas de la Villa. Al final de dicha plaza se encuentra el Arco del Alcocer o también llamado Arco de la Cárcel, por haberla albergado desde mediados del siglo XVI. Bajo el cual se encuentra la oficina de turismo. Cuando pasas el arco, das con la Plaza del Real, en ella se encuentra el ayuntamiento, su fachada del siglo XVI, procede de la desaparecida casa de los Río Ungría. Qué casualidad no hace mucho estuve haciendo una ruta  La Senda de la Fuensanta, por la localidad Alcarreña de Horche, por el que pasa este río que forma un bonito valle.




Rodeamos la plaza para salir de nuevo junto a la iglesia de San Juan donde iniciamos esta pequeña aventura por la historia de Arévalo. Sé que hay muchos más monumentos y lugares que ver, que bien merecen otra visita más sosegada a esta villa. 

Deseo que disfrutéis del paseo.




Vídeo de la ruta



Vídeo del perfil de la ruta





Época recomendada: Cualquier época del año.


Transporte: Vehículo propio.


Participantes: Antonio


Nivel de dificultad: Muy fácil

Distancia: 3,9 kg
Desnivel + 46 metros   Desnivel - 22  metros
Tiempo total: 3h 
Tiempo en movimiento: 1h 22'
Tiempo parado: 1h 37'
Velocidad media total: 1,3 km/h
Velocidad media en movimiento: 2,85 km/h
Ritmo medio en movimiento: 19:12 min/km
Indice IBP index: 16  Informe


 

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