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Comentario
El grupo
senderista NUCABAN, ha quedado en reunirse frente a la plaza de toros
de San Ildefonso. El día es primaveral e invita a una buena caminata
por este lugar, que fue punto de llegada de nuestra ruta
número 125 (Rascafría-San Ildefonso) y partida de la número 126(San Ildefonso-Segovía), ambas forman parte
del Camino de Santiago Complutense.
Comenzamos
la andadura por el paseo del Molinillo hasta alcanzar el camino de
la Silla del Rey hasta encontrar, a la izquierda, el camino del
Chorro. Vemos a
poniente el Cerro Chinarro. Vadeamos el arroyo de la Fuente y
continuamos hasta el desvío de la Cascada del Arroyo Grande.
Admiramos esta obra de la naturaleza que se encuentra a una cota
entre 1.350 y 1.400 metros. El agua es escasa, pero no necesita más
para mostrar su grandiosidad.
Descendemos de nuevo al buen camino que nos va a llevar hasta el arroyo del Chorro Chico. Cruzamos la corriente y una vez que andamos 20 ó 25 metros, giramos a nuestra derecha por una senda marcada con hitos de piedras, que nos van guiando hasta la cascada del Chorro Chico. Gracias a aquellos que con su buen hacer van colocando piedra sobre piedra, marcando con hitos el camino que servirá de guía a los que nos acercamos al lugar por primera vez.
Descendemos de nuevo al buen camino que nos va a llevar hasta el arroyo del Chorro Chico. Cruzamos la corriente y una vez que andamos 20 ó 25 metros, giramos a nuestra derecha por una senda marcada con hitos de piedras, que nos van guiando hasta la cascada del Chorro Chico. Gracias a aquellos que con su buen hacer van colocando piedra sobre piedra, marcando con hitos el camino que servirá de guía a los que nos acercamos al lugar por primera vez.
La
majestuosidad del lugar nos invita a reflexionar y mirar nuestro
interior. ¡Qué pequeñito es el ser humano y qué necio al creernos
grandes!
Frente a la destrucción…Creación. Frente a la prisa…paciencia. Frente a la abstinencia…sexo. Frente a la violencia…la sonrisa de un niño. Frente a la comida basura…un guiso de patatas a lo pobre, hecho a fuego lento con leña de encina. Frente a la guerra…abrazos y ternura. Así podíamos seguir y no terminaríamos con la miseria humana.
Frente a la destrucción…Creación. Frente a la prisa…paciencia. Frente a la abstinencia…sexo. Frente a la violencia…la sonrisa de un niño. Frente a la comida basura…un guiso de patatas a lo pobre, hecho a fuego lento con leña de encina. Frente a la guerra…abrazos y ternura. Así podíamos seguir y no terminaríamos con la miseria humana.
Descendemos
por el mismo camino de ida y retomamos la buena senda que nos
llevará hasta el puente que nos permite pasar el arroyo Hueco que y
continuamos hasta La Pedrona.
En un recodo del camino, lo dejamos y giramos a nuestra izquierda campo a través. Hacemos un vertiginoso descenso por una ladera extremando las precauciones para no dar con nuestros huesos en el suelo, (alguno no lo consigue y cae con el consiguiente regodeo general), hasta el río Cambrones.
Remontaremos la corriente unos metros por la margen izquierda hasta las Calderas. Disfrutaremos de las charcas que forman los diferentes chorros y aprovechamos para renovar nuestras fuerzas con un ligero refrigerio.
Una vez que
hemos retomado fuerzas, retornamos sobre nuestros pasos y cruzamos el
río por un lugar que nos permite saltar sin mojarnos los pies.
Por una
buena senda pasamos al lado del manantial del Matojo. Sin dejar el
camino llegamos a la piedra en equilibrio.
En la zona
de la Madre, pasamos una cancela al lado de una caseta que hay junto
a una pequeña presa y descendemos, entre la frondosidad de la
arboleda, en paralelo a la corriente hasta un puente de madera.
Cruzamos para tomar un buen camino que nos lleva hasta una cancela que nos permite salir sin más problema. Por un amplio camino llegamos al puente de la Princesa y por el Arrabal Casa de Vacas, a la calle el Pocillo. Sin dejar esta calle, nos encontramos con una fuente con agua fresca y abundante.
Cruzamos para tomar un buen camino que nos lleva hasta una cancela que nos permite salir sin más problema. Por un amplio camino llegamos al puente de la Princesa y por el Arrabal Casa de Vacas, a la calle el Pocillo. Sin dejar esta calle, nos encontramos con una fuente con agua fresca y abundante.
Por el paseo
de Santa Isabel, la pequeña comitiva de caballeros andantes, se va
acercando a la meta, en esta ocasión coincidente con el punto de
partida.
Ruta cortita
y muy interesante, que se puede hacer incluso con niños, aunque
tenga sus dificultades: la bajada campo a través y el cruce del río
en las Calderas que no hay puente. Aunque la corriente no es muy
abundante en época de crecida puede ser una dificultad considerable.
Vídeo de la ruta
Época recomendada: Primavera, Verano, Otoño, Invierno.
Transporte: Se llega a la estación de autobuses de Segovia, y desde allí sale el que viene hacia la Granja de San Ildefonso, la Sepulvedana también para directamente en el pueblo.
Caballeros participantes: Antonio, Tomás, Fermín, Amador, Carmelo, Román, Guti.
Nivel de dificultad: Media
Distancia: 12,1 km
Desnivel + 587 metros Desnivel - 585 metros
Tiempo total: 6h 34'
Tiempo en movimiento: 3h 46'
Tiempo parado: 2h 47'
Velocidad media total: 1,85 km/h
Velocidad media en movimiento: 3,22 km/h
Ritmo medio total por km: 32:49 min/km
Ritmo medio en movimiento por km: 17:15 min/km
Índice IBP Index: 64 Informe
Otras rutas por la zona:
Descargar Track ruta GPX aquí
Hola! Muchas gracias por tu blog! Es una fuente de información enorme!!! Te quería hacer una pregunta sobre esta ruta. He estado mirando el recorrido y me surge la duda de si es sencilla de seguir o si hay indicaciones por el camino. Soy un poco novata todavía en esto y me da cosa perderme por el camino.
ResponderEliminarMuchas gracias y enhorabuena por el blog!!!