Mapa de la Ruta
La ruta de hoy, son de las que considero algo aventureras, para personas que no les importe la variedad de sendas, algunas de ellas algo perdidas.
Nos encontramos en Santa María de la Alameda en la Sierra Oeste Madrileña, lindando con la provincia de Ávila. Vamos a visitar el Pueblo Fantasma de La Lastra, el cual fue abandonado después de la Guerra Civil Española. Bajaremos hacia el Embalse de la Aceña. Subiremos al Risco de Galdano. Bajaremos al Embalse del Tobar y desde allí nos dirigiremos hacia las Cascadas del Hornillo.
Notas Importantes Sobre la Ruta
- La subida al pueblo de La Lastra la realizaremos por veredas antiguas que al día de hoy, muchos tramos están destrozados por los motoristas que deterioran gravemente el suelo produciendo una gran erosión en él.
- Transitaremos junto al Río Aceña el cual tendremos que vadear en varias ocasiones y depende de la época del año habrá que descalzarse.
- Subida al Risco del Galdano, es una zona sensible en cuanto a que es frecuentado por colonias de Buitres. No se debe realizar el paso por esta zona en época de cría que suele coincidir con la primavera.
- Las Cascadas del Hornillo al día de hoy, la senda oficial esta cerrada desde el parking de acceso debido a una gran riada que ha destrozado varios puentes y parte de la pista forestal. Se puede hacer, pero siguiendo algunas veredas que se van abriendo.
Salimos del área recreativa del Hornillo, que al día de hoy está totalmente desaparecida. No me di cuenta al comenzar la ruta pues yo iba a realizarla en sentido contrario. Las últimas lluvias han destrozado gran parte de las pistas de acceso hasta el puente de hormigón de arriba, el cual ha desaparecido por las lluvias al igual que mucha parte de la pista forestal. De esto me di cuenta a la vuelta.
Cruzo el puente de la carretera sobre el río aceña, para girar a la derecha y tomar un camino que se dirige hacia la Escuela de Pesca.
Una vez que llegamos al edificio, lo rodeamos y giramos a la izquierda abandonando la pista principal. Comenzamos a subir hasta llegar a una zona de pradera. Verás las marcas de la senda por la erosión.
A partir de aquí toca subir con cierto desnivel al que no ayuda el estado del piso. Se encuentra muy deteriorado por el paso de motoristas que producen un gran deterioro en el firme.
Según vamos subiendo podemos ver cómo se va agrandando el Valle del río Aceña.
En nuestro camino vamos a pasar por numerosas portillas, las cuales hay que acordarse de cerrarlas.
Vadeamos sin problemas el Arroyo de las Callejas, ya estamos muy cerca del pueblo de La Lastra.
Me doy una pequeña vuelta por este pequeño pueblo que en su día debió de tener vida. Durante la Guerra Civil Española fue bombardeado, por lo que sus gentes al termino de esta, decidieron partir hacia otros lugares a vivir. Se encuentra muy cerca del pueblo de Santa María de la Alameda.
Una vez que me doy una pequeña vuelta pensando como sería la vida de estas gentes en su época. Retomo mi camino cruzando la portilla 5 que me lleva a pasar por una gran pradera que cruzo y vuelvo a cruzar la portilla 6.
Esta senda nos lleva hasta el nacimiento del Arroyo de las Callejas, he de decir que esta senda en algunos tramos se encuentra muy enmarañada, viendo luego el mapa creo que se puede solucionar para llegar a este mismo punto, cuando pasemos la portilla 5 en la pradera nos desviamos hacia la izquierda sin llegar a pasar la portilla 6 y este camino termina igualmente en el nacimiento de dicho arroyo. A partir de aquí el terreno se encuentra embarrado por las últimas lluvias y por el paso del ganado, así que, armarse de paciencia para pasar este pequeño tramo.
Al final del descenso pasamos una portilla y llegamos a una pista asfaltada. Subimos para ver las vistas desde la misma presa.
Una vez que vemos las vistas y el pueblo de Peguerinos al fondo, regresamos por la pista y comenzamos a bajar de nuevo hasta llegar a una curva donde abandonamos el asfalto para tomar un camino de tierra.
Seguimos el camino hasta toparnos con el río Aceña. El cual tendremos que vadear en varias ocasiones. En esta ocasión tuve que descalzarme alguna vez para continuar con mi camino.
Recordar que esta zona es de especial protección en la cría del Buitre y que en primavera no es muy aconsejable el paso por esta zona para no molestarlos.
Seguimos subiendo caminando por encima del canal, con cierto cuidado porque caminas sobre losas de piedra que pueden caer.
Aquel día comenzó a nevar y el paisaje era increíblemente hermoso.
Una vez que rebasamos la parte del Risco del Galdano, vamos a continuar ahora por un terreno inundado por plantas herbáceas. Hay que prestar atención a la vereda para no perderla.
En el camino superamos un pequeño murete caído y un pequeño arroyo.
La vereda que ha ido siguiendo el trazado del canal enlaza con una pista que hace tiempo tome en la ruta Peguerinos a Abantos por Senda de la Mariposa, Mirador de Cuelgamuros, Cruz de Rubens y Presa de la Aceña, Esta pista nos lleva hasta el embalse del Tobar.
Bajamos a la presa la cual cruzamos.
Al otro lado de la presa, vamos a subir por una vereda, en la primera parte confusa y con pendiente hasta que conectamos con una vereda más clara y con menos pendiente. Me sorprendió pues yo no había subido por aquí antes.
La vereda conecta con una pista que recorre la parte alta el Valle del arroyo del Tobar.
Mientras camino disfruto de unas maravillas de vistas, me acerco a un promontorio rocoso a modo de mirador natural con unas vistas increíbles.
Me quedo un rato disfrutando de este hermoso mirador y la verdad que me costaba irme de aquí.
La pista comienza a descender, voy pegado al pinar por mi izquierda al ver que se va alejando cruzamos un pequeño murete caído para alcanzar una pista que va bordeando el pinar y se adentra en él.
La pista asfaltada llega hasta el Arroyo del Hornillo el cual vamos a acompañar un pequeño tramo. Llegado a un punto abandonamos la pista para bajar por el Arroyo del Hornillo para disfrutar de las Cascadas Altas del Hornillo.
En la parte baja vadeamos sin problemas el Arroyo del Hornillo para continuar por la otra margen. Nos encontramos una pequeña escalera.
La vereda discurre muy cerca del agua hasta llegar a un murete que cruzamos.
Al pasar al otro lado del muro comienzo a darme cuenta de que algo había ocurrido en la zona. Me fijo que hay grandes arboles caídos.
Alcanzo la parte alta de las Cascadas del Hornillo.
Comienzo a descender donde hay un pequeño mirador.
Una vez en la parte baja me quedo un pequeño momento disfrutando de las vistas al ver caer el agua.
Me despido de la hermosa cascada y continuo mi camino en descenso. Yo pensaba, ya no me queda nada más que llegar al puente y luego una pista que me dejará en el aparcamiento. Pero vaya sorpresa me llevé cuando llego a la altura del puente y me digo ¿Dónde esta?. Cuando me percibo que el puente de hormigón había sido derribado por una riada de gran calibre, que ni puedo ni imaginar. A su vez, me fijo que tampoco existe la pista forestal que bajaba, ya que, al bajar el agua arrastrando grandes piedras arraso con ella.
Con lo que me toca subir por una pequeña vereda que me fijo que personas anteriores a mi. habían ido marcando. Bajo de nuevo a la pista por un pequeño tramo que me vuelve a hacer vadear el arroyo para seguir otra vereda que me deja en el aparcamiento. Una vez alli, es cuando me doy cuenta realmente de como había quedado todo. Aquí antes había una zona de césped con unos bancos, pues de eso no queda nada de nada, solo grandes piedras. Así que de momento este tramo esta cerrado.
Deseo que os guste.
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