Guadalajara Monumental

 Mapa de la Ruta

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 Hoy vamos a visitar la Capital de Guadalajara en la comarca de La Alcarria. Visitaremos una gran parte de sus monumentos. Es una ciudad con mucha historia entre sus piedras.

Comenzamos nuestro recorrido en:

1º Parque de la Huerta de San Antonio. Un parque con un espacio que por su distribución y soluciones adoptadas recuerda de alguna forma a los patios palaciegos musulmanes.

2º Torreón de Alvar Fáñez. El nombre de este torreón recuerda la leyenda de la reconquista de Guadalajara por Alvar Fáñez de Minaya en 1085.

Es una torre pentagonal, probablemente del siglo XIV, que defendía una de las puertas de la ciudad, llamada también Puerta de la Feria o del Cristo de la Feria. Su fachada posterior es abierta, para evitar que el enemigo pudiera hacerse fuerte en ella si lograba conquistarla.

3º Palacio del Infantado. La historia del palacio del Infantado, de los duques del Infantado, la casa principal de los Mendoza, puede resumirse en cuatro actos: su construcción, iniciada en 1480 y concluida a fines del siglo XV, bajo la dirección de Juan Guas; su reforma, por el quinto duque del Infantado, entre 1570 y 1580, que introdujo los elementos renacentistas; su ruina, a causa de un incendio en 1936, y, finalmente, su restauración en los años sesenta, lenta y discutible. Aun hoy, transformado y mutilado, es un edificio magnífico y sorprendente.

Los contrastes abundan en la fachada del palacio: entre la traza gótica inicial y las ventanas renacentistas; entre los vanos de la galería superior y el gran muro de fortaleza del cuerpo bajo, cuya solidez acentúan las cabezas de los clavos de piedra; entre este muro esquemático y la complicadísima portada, marco sucesivo de los emblemas de la familia y del constructor; finalmente, sobre la piedra ocre, al caer la tarde, queda el contraste entre las luces y las sombras.

4º Iglesia de Nuestra Señora de los Remedios. Esta iglesia renacentista, que formaba parte del convento y Colegio de Doncellas de Nuestra Señora del Remedio, que regentaron las monjas jerónimas, ha sido restaurada recientemente y rehabilitada como auditorio de música.

Fue edificada a partir de 1573; en su exterior resalta la bella composición del atrio, formado por tres grandes arcos de medio punto.

5º Alcazar de Guadalajara. Las ruinas actuales datan del siglo XIII, aunque no se descarta que en el mismo emplazamiento hubiera existido una fortaleza árabe. El Álcazar fue residencia de los reyes castellanos desde el siglo XIII hasta fines del XV. Después, cuando perdió esa función, conoció un largo proceso de abandono y ruina.

En el siglo XVIII, el edificio fue ampliado y convertido en Fábrica de Paños; en el siglo XIX, sucesivamente, se establecieron en él los cuarteles de Santa Isabel y San Carlos, el Colegio de Huérfanos de la Guerra y el Batallón de Aerostación. Durante la Guerra Civil de 1936-1939, el Álcazar fue bombardeado y destruido casi por completo. Desde 1998 ha sido objeto de varias campañas de excavación arqueológica. Estos trabajos han revelado la importancia de este monumento en la historia de la arquitectura civil de la Baja Edad Media.

6º Canal del Parque Fluvial del Alamín

7º Torreón del Alamín. La torre y el puente del Alamín constituyen un conjunto de especial interés. El Alamín es el barrio extramuros que desde época medieval se asienta al otro lado del barranco del mismo nombre, al Este de la ciudad.

A fines del siglo XIII, el puente fue edificado, o reedificado, por la infanta Isabel, señora de Guadalajara, y por su hermana Beatriz, con el fin de facilitar el acceso al convento de San Bernardo que ellas mismas habían fundado al otro lado del barranco. La torre, que defendía el puente, es de planta cuadrada, de tres pisos cubiertos por bóvedas de ladrillo.

8º Concatedal de Santa María. En esta iglesia, cuyo origen se remonta a fines del siglo XIII o principios del XIV, se suceden tres estilos principales: el mudéjar, que define las puertas de ladrillo, con arcos de herradura apuntados, y la torre, inicialmente exenta; el estilo renacentista, incorporado a principios del siglo XVI, en el pórtico, con característicos capiteles alcarreños, y, finalmente, el barroco, en la bóveda interior.

9º Convento Carmelitas Descalzas, construido a partir de 1625, según trazas del arquitecto carmelita fray Alberto de la Madre de Dios.

10º Palacio de la Cotilla. A fines del siglo XIX, sus propietarios eran los marqueses de Villamejor, Ana de Torres e Ignacio de Figueroa, padres del conde de Romanones. De aquella época se conserva el Salón Chino, decorado todavía con el papel pintado original, según el estilo de la dinastía Qing, cuya rareza en España le otorga un valor excepcional.

11º Capilla de Luis de Lucena. Esta capilla, que estuvo adosada a la iglesia de San Miguel, ya desaparecida, revela la tradición mudéjar en el uso del ladrillo, pero su estilo caprichoso obedece al manierismo del siglo XVI. Fue fundada por el humanista Luis de Lucena y su construcción, tal vez trazada por él mismo, data de 1540.

12º Puerta de Bejanque. Los restos de las murallas de Guadalajara pueden localizarse en los barrancos del Coquín y del Alamín. De sus puertas sólo queda este lienzo en la plaza de Bejanque, recientemente recuperado. Puede fecharse en el siglo XIV.

13º Restos Murallas del Fortín

14º Cripta de los Duques del Infantado. La iglesia del Convento de San Francisco, destruida y reconstruida varias veces, conserva un tesoro poco conocido pero de gran valor arquitectónico: bajo el ábside de estilo gótico, se oculta el panteón de la familia Mendoza, realizado a semejanza del Panteón de los Reyes de El Escorial.

15º Ermita de San Roque

16º Panteón de la Duquesa de Sevillano. La duquesa, en torno a 1881, encargó a Ricardo Velázquez Bosco la construcción de un vasto complejo de edificios, destinado a establecimientos benéficos y a panteón familiar, al sudoeste de la ciudad, a un lado del actual parque de San Roque.

17º Parque de la Concordia.

18º Iglesia de San Gines.

19º Instituto de los Maristas

20º Iglesia del Carmen

21º Iglesia de San Nicolás. La Iglesia de San Nicolás, iniciada en 1647, fue primero la del Colegio jesuita de la Trinidad, fundado por la familia Lasarte en 1619. Sobre su fachada de ladrillo destaca la portada barroca de piedra, de fines del siglo XVII. En ella, desde una hornacina, la estatua de la Fe preside una representación de la Santísima Trinidad.

22º Plaza del Concejo. Allí perviven las ruinas de la vieja iglesia de San Gil. Tan sólo queda el ábside mudéjar del siglo XIII, bajo la sombra de un edificio contemporáneo.

23º Plaza Mayor

24º Palacio de Antonio de Mendoza. El palacio fue proyectado por Lorenzo Vázquez y construido en torno a 1510.

25º Iglesia de Santiago Apostol. El interior de esta iglesia, gótico y mudéjar, por debajo del nivel de la calle actual, es de tres naves, separadas por pilastras de piedra, sin crucero. Entre ellas se levantan a gran altura los arcos apuntados. Sobre toda la extensión de la nave central se extiende un artesonado mudéjar. 

Deseo que os guste este paseo. 

Nota: la información sobre los monumentos esta tomada de la página de turismo del ayuntamiento de Guadalajara.

Descargar Track de la ruta aquí.

Otras rutas mías por la zona

El Garduño de Cela pasando por Durón, Budia y El Olivar.

Mapa de la Ruta

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Vuelvo de nuevo a una de mis comarcas preferidas La Alcarria. No tiene grandes montañas, ni grandes valles, pero tiene algo especial que a mi me atrajo desde el primer momento. Esa soledad, naturaleza aspera y el silencio que te envuelve. 

La Ruta de hoy El Garduño de Cela se realizo en honor al escritor que visito parte de esta tierra, caminando y disfrutando de ella en cada paso que dio. Es un sendero que se encuentra balizado, aunque al día de hoy la balización es muy escasa y te puedes perder fácilmente. Por lo que es recomendable llevar el track consigo. Dicha ruta nos va hacer pasar por los pueblos de Durón que es donde se inicia la ruta, Budia y El Olivar. 

Partimos de la pequeña localidad de Durón para dirigirnos hacia el Arroyo de la Vega. Antes vamos a pasar por el interior del pueblo para recorrer parte de sus calles. Nos encontramos con una bonita Fuente Barroca de 1793 junto al Ayuntamiento.

En nuestro paseo nos encontramos con algunas casas solariegas y con la Iglesia de Nuestra Señora de la Cuesta. 

Nos encontramos justo en el inicio de la ruta con una Picota, una Fuente y el Panel Informativo de la ruta.

Nos vamos a adentrar por una pequeña senda que sigue junto al cauce del Arroyo de la Vega. Siempre me ha sorprendido los pequeños oasis que tiene esta comarca. Parece que te encuentras en medio de un vergel, la vegetación se encuentra exuberante el agua corre a tu lado. En esta primera parte de la ruta veremos algunos postes baliza de la ruta. En uno de ellos veremos que nos indica hacia Budia. Justo en este punto será por donde nosotros regresemos desde el Olivar por la izquierda. Así que seguimos de frente subiendo hacia Budia.

Nos encontramos con multitud de zarzas que nos muestran los frutos del otoño.

Estamos acercandonos al pueblo de Budia y vamos a cruzar a la otra margen del Arroyo de la Vega para subir una pequeña pendiente junto a la zona deportiva que nos da acceso al pueblo. Entramos por su calles estrechas y nos vamos a ir hacia la parte Norte del pueblo para visitar la Ermita de la Soledad y los Antiguos Lavaderos. 

Retrocedemos un poco para subir por la Calle los Donantes de Sangre, para acercarnos a un pequeño Mirador de Budia.

Desde este pequeño mirador tenemos una vista aérea del pueblo. Y a lo lejos se encuentran las famosas Tetas de Viana, un lugar al que proximamente subiré. Bajamos por unas pequeñas escaleras a la derecha hacia el Ayuntamiento antes pasaremos por la Iglesia de Santiago Apostol.

Entramos en la bonita Plaza Mayor de Budia. Bien merece la pena quedarse un momento y disfrutar de ella. A la entrada veremos una placa en la que indica que aquí paso una noche Camilo Jose Cela, que me imagino no le traería buenos recuerdos. Dijo el de este lugar "La plaza parece la de un pueblo moro".

 

Veo una oficina de turismo y me acerco hacia ella para obtener más informacion del pueblo. Amablemente Jose Luis, el encargado de la oficina me ofrece numerosa información que le agradezco. Me narra sucesos y noticias del pueblo, me encanta cuando la gente te cuenta sobre su vida en el lugar y del pueblo.

Jose Luis se ofrece a acompañarme durante un breve tramo, por donde me indica que hay numerosas casas solariegas. También  me comenta que el pueblo tuvo mucho auge en sus tiempos por la fabricación de Curtidos y Paños. Es un pueblo con numerosas fuentes de aguas cristalinas que no les faltan durante todo el año, debido a la gran cantidad de manantiales que posee. Doy fe que probé sus aguas que son frescas y sacian tu sed. Me despido de José Luis diciendole que probablemente vuelva al pueblo cuando realice la Ruta del Mirador del Medio Mundo.

Prosigo la calle hasta llegar al llamado Calvario que se encuentra junto a la Ermita de Santa Lucia.

Desde este lugar me acerco a las Ruinas del Antiguo Monasterio de las Carmelitas. Pues eso es lo que queda junto al cementerio. Al lado se encuentra un antiguo Pozo de Nieve.

Vuelvo de nuevo a la ruta donde me encuentro con una fuente y junto a ella unos bancos. Aprovecho para comer algo y beber de sus aguas. 

Salimos por una pista asfaltada que nos conduce hacia El Olivar. En esta zona la balización no existe, por lo cual mirar el track. A mitad de camino de esta pista nos vamos a desviar a la izquierda para acercarnos a la Fuente del Cuerno. Se trata de un bonito paraje que casi me lo paso de largo.

Ahora voy a continuar por un camino en lugar de tomar la pista asfaltada.

Eso si, es una cuesta de unos 2 km, que yo no veía nunca su fin, hasta que vuelve a conectar con la pista asfaltada que nos lleva al pueblo de El Olivar. A la entrada del pueblo nos encontramos con la Ermita de la Trinidad y una Picota.

Es curioso comprobar como en estos pequeños pueblos una de las pocas formas que tiene la gente de abastecerse de alimentos, es con los camiones que los visitan periodicamente.

Llegamos a su Plaza Mayor donde nos encontramos con el Ayuntamiento y la Iglesia.

Salimos entres sus calles bien puestas. Los campos de cereal nos rodean, nos dejan ver los cielos donde las nubes se arremolinan anunciando lluvia.

En nuestro camino veremos como otra ruta, la Ruta de la Alcarria nos abandona por la derecha. Tenemos que prestar atención porque debido a la no balización de la ruta te puedes pasar el desvío a la izquierda por el que bajaremos. 

Te introduces en un pequeño barranco  para después subir a una ligera crestería que te proporciona unas hermosas vistas. Puedes ver el pueblo de Budia, El Embalse de Entrepeñas, Las Tetas de Viana,  La Hoz Angosta que ya hablaré en algún momento sobre ella y me imagino que en frente se hallará el Ruta del Mirador del Medio Mundo.

Mi camino se vuelve a reencontrar con el Arroyo de la Vega para volver por el camino por el que vine.

Deseo que os guste.

 

Descargar el Track de la Ruta Aquí

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